Con la próxima implementación de la nueva directiva europea de protección del denunciante (DIRECTIVA (UE) 2019/1937 DEL PARLAMENTO EUROPEO Y DEL CONSEJO), las empresas se verán obligadas a establecer un canal de denuncias.
Este canal será una herramienta esencial para el compliance officer. Mientras las grandes empresas contarán con un compliance officer interno, las empresas más pequeñas probablemente optarán por externalizar la función, siguiendo la recomendación de la directiva. Esta externalización implica recurrir a un tercero que ofrezca el servicio de compliance officer como servicio, actuando solo en caso de denuncias.
Este nuevo servicio, de compliance officer externalizado, será proporcionado por empresas especializadas en Compliance. Estas pueden ser grandes auditoras, bufetes legales de renombre o incluso pequeñas boutiques de especialistas en cumplimiento normativo.
Un aspecto crucial es gestionar adecuadamente a los proveedores para evitar dependencias innecesarias. Muchos despachos ofrecerán un servicio integral, incluyendo el portal de denuncias. Nuestra recomendación es que las empresas busquen soluciones que no dependan exclusivamente de un proveedor. Esto implica que, si un despacho ofrece un servicio integral, lo haga sobre una plataforma que no sea propiedad del despacho o, al menos, que otros despachos puedan operar sobre la misma.
Esta estrategia facilita posibles cambios de proveedores sin generar una dependencia tan fuerte que impida considerar el cambio. La cautividad de un proveedor está alineada con la eliminación de la competencia y la dificultad para negociar precios de mercado.
Hemos desarrollado una plataforma que permite a los expertos en Compliance ofrecer y gestionar un canal de denuncias para sus clientes. La plataforma no está ligada exclusivamente a un despacho, evitando así la dependencia descrita anteriormente. Nos preocupamos por la tecnología y garantizamos el mejor servicio, permitiendo a los especialistas y las empresas cambiar de proveedor si lo desean, sin obstáculos.